Testimonios
Son las tres ya me voy a los toros
Joaquín Pardavé
Son las tres ya me voy a los toros, no me detengan, no como nada.
Que la gente estará en los tendidos, desde temprano,
bien asoleada.
Y quizá ya no encuentre boletos y de gorra habré entrado yo,
que esta tarde el compadre Silverio, brindrme un toro me prometió.
Ay! mi coompadre silverio, como torea, como torea;
Vaya el domingo a los toros, pa que lo vea, pa que lo vea,
y después que lo haya visto le juro que como hay dios.
Que grita desde el tendido, con el pecho enronquecido
Como lo he gritado yo.
¡ Silverio tu eres el amo y no habrá ningún fulano que venga y diga que no!
Ya me voy de la plaza el relajo, de las paletas ya ha comenzado.
Y el prietito que toca la banda, la macarena me ha dedicado.
A empujones, frentones y gritos, abran paso que ahi les voy yo, que esta tarde al compadre Silverio
solito en hombros lo saco yo.
Ay! mi compadre silverio, como torea, como torea;
Vaya el domingo a los toros, pa que lo vea, pa que lo vea.
Y después que lo haya visto le juro, que como hay dios.
Que grita desde el tendido, con el pecho enroquecido
como lo he gritado yo.
¡Silverio tu eres el amo y no habrá ningún fulano que venga y diga que no!